Los más altos niveles de Melatonina se producen durante la noche, de modo que la liberación de Melatonina se correlaciona con el ciclo del cuerpo de día y de noche. Su producción es directamente influenciada la relación de actividad y reposo, o sea, la producción de la Melatonina disminuye en situaciones de luz y actividad, y aumenta en situaciones de baja claridad y reposo, hecho que hace la presencia de melatonina en la sangre esencial para un sueño tranquilo y profundo permitiendo así a nuestro organismo restaurar las células nerviosas mientras dormimos.
La melatonina es una hormona liposoluble e hidrosoluble que el organismo metaboliza de manera notablemente rápida, es fundamental para el mantenimiento de la atención, la memoria, el raciocinio, el humor y la creatividad, mejora la calidad de su noche estimulando el sueño y la relajación total.